Dios está vivo!
Aprovecho los pensamientos de los días 5 y 6 de Junio para poneros un nuevo satsang de Gururaj que fue utilizado en nuestro retiro de meditación de El Escorial.
Uno más sobre el Bhakti Yoga. Es de nuevo el tema que nos trae Respuestas al corazón en su página 87; Dios y su representación en el plano concreto, de lo encarnado. Al decir encarnado aquí me refiero tanto a su representación en las encarnaciones, como su encarnación universal, presente en toda la creación, presente en toda la manifestación, en todo este universo. El Dios vivo!
Esta faceta de la enseñanza espiritual es la más susceptible de generar fundamentalismos y apegos innecesarios. Al mismo tiempo es absolutamente necesario en el proceso y se ha demostrado a lo largo de los siglos como una de las mejores terapias que existen. Darte cuenta que no estás solo, que Dios está vivo.
A pesar de que nos hacemos representaciones de Dios, conceptualizaciones de todo tipo; la aproximación más efectiva a Dios es la de amarle, pues así nos abrimos al amor que Él nos tiene a nosotros. Es un tema muy sutil, pero es experiencial sobre todo. No es un concepto, es una experiencia.
Le amamos a través de nuestras conceptualizaciones, desde este punto de vista, el Dios personal es una creación de los hombres, y de hecho hay tantos dioses personales como hombres, pues hasta los ateos, a su manera, hablan con su conceptualización de Dios, cuando cualquier ser humano habla connsigo mismo sinceramente, es lo que está haciendo.
Esta practica espiritual común a cualquier aproximación que se ha hecho o que se hará a la espiritualidad se la puede denominar también practicar la presencia. Vivir en presencia de Dios que está contigo y te ama y te deja ser como eres, tal cual, sin que te tengas que comparar con nada ni con nadie.
Hablar con Él en vez de con los personajes de tus circunstancias que solo existen en tu cabeza y sobre los que quieres construir una identidad falsa. Por eso usamos representaciones, como un medio para llegar y activar aquello que surge de nuestro interior y que cuando lo reconocemos dentro vemos como también está impregnando todo a nuestro alrededor.
No queremos a un Dios muerto, queremos al Dios viviente, quizás de ahí viene el mito de la resurrección. En realidad quiere decir que Dios está vivo, esta delante de ti todo el tiempo. Es omnipresente, eso quiere decir que está en todas partes: en tu aliento mismo, en cada una de tus células, en esa persona que te cae ten mal, sí en esa también.
Es una realidad existente que todo lo impregna, y lo que quieres es de verdad conocerlo en cada pulsación de tu corazón, según corre la sangre por tus venas. En la canción que cantas cada momento, la canción de la vida, la fuerza que te empujo a andar, a hablar, a amar, a odiar también.. eso es la fe, la confianza, con fe, con fianza. En esa fuerza, en ese Otro con «O» mayúscula.
La vida no es una carga, es la expresión de eso que llamamos Dios, tanto desde el punto de vista abstracto de esta cualidad inefable, como desde el punto de vista concreto de su expresión en ti mismo y en tu prójimo. En todo prójimo sin excepción por cierto.
La meditación y las prácticas espirituales sirven para acercarnos a esto desde el punto de vista experiencial; que como efecto colateral nos hace mejores personas, y por lo tanto va germinando poco a poco, individuo a individuo, en una mejor sociedad.
Entre todas las prácticas espirituales, la más poderosa y la que hace el viaje más disfrutable, es el Bhakti Yoga. El camino de la devoción y de la Gracia, el 70% de cualquier práctica espiritual.
4 de Junio 7 de Junio