Como vamos a poder deshacernos del ego, si somos el ego. Desde el punto de vista relativo, la existencia que conocemos esta compuesta por las impresiones que forman el ego. Sin ellas tu no tendrías existencia.
Imagínate que hubieras nacido sin instrumentos de percepción, sin sentidos: ni olfato, ni gusto, ni vista, ni oído, ni tacto. ¿Donde estarías tú? No existirías, ni aunque te hubiesen podido mantener vivo.
Tu existencia depende del saco de huellas e impresiones en la mente, que conforman tu ego. Ese saco de huellas funciona por si mismo. Con esto lo que quiero decir es que tu no reconoces, por ejemplo, la letra «a», sino que la letra «a» es reconocida por el saco de huellas que constituye el ego de forma automática, de la misma manera que de forma automática el hincha del Madrid, lo es porque tiene esa huella implantada en su sistema de huellas, y si el Madrid pierde se entristece sin poder evitarlo, ya que el saco de huellas y sus particulares patrones funcionan por si mismos.
¿Que podemos hacer con este saco de huellas? Fácil, estirarlo hasta hacerlo trasparente. La pregunta es: ¿Como estiramos el saco de huellas?
Las impresiones y patrones que forman nuestro ego, y que se han generado a través de un proceso de interacción entre la energía que anima nuestra particular forma de vida y el entorno (con en el que interdependemos en una existencia compartida), han creado un sistema de impresiones y patrones en la mente que funcionan por si mismos.
El problema es que estos patrones están en conflicto unos con otros, se contradicen unos a otros y generan una tensión que les impide fluir de forma natural. Por ejemplo: si nuestro padre nos prohibía fumar de pequeños mientras el fumaba como un carretero, esto va a generar un patrón conflictivo entre los que se crean de «admiración a papa y modelarme a su imagen» y el de las «instrucciones que me da papa». El patrón esta ahí, pero como quien dice esta contraído, lo tenemos que estirar y hacerlo trasparente.
Uno de los mejores ejercicios para hacernos trasparentes es pensar, hablar y actuar de la misma manera. De alguna manera nos obliga a estirar los patrones y nos hacemos trasparentes. Sin doblez, como se dice en castellano. Hoy haz esta práctica conscientemente. Observa como piensas, como hablas y como actúas. Mira a ver donde te estas contradiciendo a ti mismo. Donde tu palabra contradice a tu pensamiento o tus acciones a tus palabras. Pensando, hablando y actuando de la misma manera estas estirando el ego y haciéndolo trasparente. Esto es un proceso de purificación personal.
Lee y contempla cada uno de los tres pensamientos para el día en la pagina 225 de Respuestas al corazón