Para liberarse del miedo
Para poder dejarnos fluir en este acontecimiento del amor, tenemos que vencer nuestros miedos y encontrar una forma práctica de vivir.
La primera y más eficaz manera de perder nuestros miedos es quedar totalmente absortos en el presente. Al fin y al cabo es lo único que podemos hacer en este momento, lo que quiera que sea que hagamos. Ahora, en tu caso, que lees estas lineas. Leer este post.
Hay muchos factores en el miedo; el sentimiento de culpa, el sentimiento de inadecuación, el sentirse indigno etc.. Todos estos factores se apoyan en uno básico. El miedo a la perdida del yo. El miedo a perderte algo, el miedo a no ganar lo que piensas que es ganar. En el mientras tanto, la vida que transcurre en este mismo momento pasa delante de ti y pierdes este valioso momento en disquisiciones que no van a ninguna parte.
Para vivir hay que ser intrépido, para ser intrépido hay que perder todos los miedos, que es lo mismo que decir, aceptarlos cuando están ahí y dar un intrépido salto al acontecimiento del amor que surge en la naturaleza cada primavera en la naturaleza, eterna primavera en el alma del ser humano.
Este es un proceso instantáneo donde simplemente te centras en lo que estas haciendo ahora mismo. Las técnicas de meditación, como el tratak, te darán la capacidad de concentración de la mente. Entonces simplemente fluyes con la vida, con la acción que realizas en este momento que es lo que puedes hacer y si te centras en ella de forma completa terminaras convirtiéndola en una ofrenda a la misma vida, habiéndote perdido completamente en la acción misma que realizas.
Para dar este salto al vació, este salto a lo desconocido, necesitas confianza. Es un salto al vació porque implica abandonar las ideas que tienes de ti mismo. Para abandonar las ideas que tienes de ti mismo lo que tienes es que escucharte, oír lo que te dices a ti mismo de ti mismo. Ya veras como no te dices nada demasiado elevado. Más bien son mezquindades, en realidad no es difícil de abandonar, pues no tienen ningún valor real. Les das importancia y te pierdes lo que verdaderamente tiene valor. Este mismo instante donde la vida ocurre.
Confianza. Con Fe. No estás solo. Caminas de la mano con la divinidad. Ese otro con «O» mayúscula, que eres tu cuando te has lanzado a lo desconocido de vivir el instante de la vida, perdido todo ya, sin nada que guardar. Hoy, solo por hoy repítete esto. Te lo tendrás que repetir aún muchas veces hasta que se haga parte de ti, hasta que penetre cada una de tus células y huesos. Hoy mira la gran oportunidad que tienes delante. La oportunidad de vivir. La oportunidad de conocer la existencia de la mano de la existencia misma.
Lee los pensamientos de Respuestas al corazón en la página 27 y déjate penetrar por la profundidad de su significado y hazlo real en tu vida viviendo tu actualidad plenamente. Hoy solo por hoy déjate centrarte plenamente en cada cosa que hagas. Haz de tu día una meditación.